Una de las aplicaciones médicas que mayores beneficios traerá para la salud humana, a pesar de estar aún en fase de experimentación, es la reconstrucción de huesos y músculos.
Esto se podrá llevar a cabo, empleando dispositivos programados para identificar fisuras. Estos procedimientos contarán con dos técnicas principales:
‐ Procesos de aceleración para la recuperación del hueso o músculo roto
‐ El dispositivo se fundirá con el propio hueso o músculo para regenerarlo
Sabemos que la medicina regenerativa pretende ayudar al cuerpo a salvarse a sí mismo. Entonces el primer estadio consiste en la sustitución de órganos defectuosos. Los primeros avances en medicina regenerativa se lograron en los años setenta, cuando aparecieron los primeros materiales implantables en el cuerpo.
Sin embargo, estos materiales sólo eran “piezas de recambio” inertes y no biodegradables que resultaban siendo construidas para otras aplicaciones.
A mediados de la década de los ochenta nació la segunda generación de materiales, estos eran a base de cerámicas y vidrio, con la propiedad de ser biodegradables una vez reparada la lesión, de esta manera se estimulaba la actividad de autoregeneración del organismo.
Hoy en día, con la nanotecnología se pretende combinar propiedades como biodegradabilidad y bioactividad en una sola estructura capaz de regenerar el tejido, como son los dispositivos a escala nanométrica.
Referencia: Logotheditis. (2006).
Oreja muestra del laboratorio de
Anthony Atala, en Estados Unidos. A.A ( 2011).Regeneración Téjido. Reduperado
el 24 de octubre del 2012.Disponible en: http://www.reformadorcristiano.org/index.php?limitstart=4
No hay comentarios:
Publicar un comentario